
Cuando Calbuco dejó de ser una isla
Al sur de Chile, donde el territorio comienza a desmembrarse y a transformarse en una angosta faja rodeada de islas, fiordos y canales, se encuentra Calbuco. Para conectar por vía terrestre esta localidad al continente hace ya cinco décadas fue construido un piedraplén, que cambió la vida de sus habitantes para siempre.
Al sur de Chile, donde el territorio comienza a desmembrarse y a transformarse en una angosta faja rodeada de islas, fiordos y canales, se encuentra Calbuco. Para conectar por vía terrestre esta localidad al continente hace ya cinco décadas fue construido un piedraplén, que cambió la vida de sus habitantes para siempre.
Hasta ese momento, el transporte sólo era posible por vía marítima, a través de la estrecha franja del canal Caicaén. Esto era un grave problema durante el invierno, cuando las inclemencias del tiempo impedían que las embarcaciones cruzaran al continente.
La construcción de este camino de piedras y ripio no estuvo exenta de polémica, los planos originales indicaban la creación de un puente de una vía en el que se cobraría peaje. Sin embargo, cuando su edificación ya había sido aprobada por las autoridades de la época, éstas modificaron los planes, optando por un piedraplén.
Este cambio benefició a los vecinos al contemplar la construcción de dos vías y de la gratuidad del tránsito. Para los pescadores, en cambio, esta medida implicó cerrar el paso a sus embarcaciones, obligándolos a dar una vuelta alrededor de la isla para llegar al otro lado del canal.
Después de dos años de construcción, el 15 de mayo de 1966 se inauguró el piedraplén, que se convirtió en uno de los hitos arquitectónicos destacados de la ciudad. Finalmente, los calbucanos tuvieron la posibilidad de cruzar por vía terrestre los 240 metros que los separaban del continente, terminando con las dificultades en el transporte y con su aislamiento.
El piedraplén en la actualidad
Pese a la importancia de esta obra para la isla, en la actualidad aún genera polémica. Desde su construcción, hace más de 50 años, se acumulan sedimentos en sus bordes que contaminan las aguas del canal Caicaén, lo que podría tener un efecto negativo en la pesca artesanal y a los cultivos de mariscos ubicados en las inmediaciones del lugar.
El proceso de construcción y las celebraciones del día de la inauguración de esta obra pública componen la galería de imágenes que acompaña esta reseña. Estos recuerdos fotográficos han sido donados por los vecinos de Calbuco en encuentros de memorias realizados por la Biblioteca Pública N° 23 y Memorias del Siglo XX.
Imágenes, videos y documentos
Cuando Calbuco dejó de ser una isla
Heriberto y René Bahamonde Tejeda en los cimientos del piedraplén de Calbuco.

Calbucanos reunidos con motivo de la inauguración del piedraplén que unió a la isla de Calbuco con el continente.

Vista aérea de la inauguración del piedraplén que une la isla de Calbuco con el continente. La noche anterior un fuerte temporal deterioró el sector central de esta construcción.

Cruce por el puente de piedras, semanas antes de su inauguración. Entre los peatones se encuentran: Heriberto Bahamonde, Norma Díaz Otey y René Bahamonde.

Autoridades cruzan el piedraplén que une la isla de Calbuco con el continente.

Fotografía tomada días después de su inauguración. Esta construcción permitió unir la isla de Calbuco con el continente.

Presentación de un conjunto folklórico en el acto de inauguración del piedraplén que une la isla de Calbuco con el continente.

Primeras personas que cruzan el piedraplén que une la isla de Calbuco con el continente durante su construcción.

Panorámica que muestra la construcción del camino que unió la isla de Calbuco con el continente.

Vista de la isla de Calbuco. Se aprecia el piedraplén que une a la isla con el continente.

Presentación de un grupo folklórico en el acto de inauguración del piedraplén que une la isla de Calbuco con el continente.
